Hondas de los 90, esos pepinillos de tracción delantera con motores diminutos de potencias explosivas, chasis de alto nivel, y un sonido que ha marcado a toda una generación de entusiastas de los coches japoneses. Hoy vamos a hacer un breve repaso a esos coches que con los años parece que ganan encanto, sus virtudes, sus enfoques, sus luces y sus sombras.
Para ilustrar esta entrada hemos conseguido juntar una buena muestra de Hondas muy bien puestos, y nuestros hamijos de Racing Shot Works se han dedicado a sacarles fotillos que merezcan la pena, de esas que yo no lograría nunca sacar. El resultado es el que os presentamos hoy:
Para centrar un poco el tiro y ubicar a los neófitos en esto de los Hondas míticos y el JDM, baste decir que hablamos de Japón, de los años 90, de que internet iba por el dial de teléfono, y que en tierras niponas la rivalidad entre sus grandes fabricantes por hacer coches deportivos de enorme eficacia estaba en pleno auge. Mientras casi todos apostaban por grandes bestias, generalmente con motores turbo muy potenciables que hoy se cotizan a precio de colección (Nissan Skyline GTR, Mazda RX-7, Toyota Supra, Mitsu Lancer Evolution, etc.), Honda se hacía con un nicho de mercado muy particular: El de los utilitarios con enorme eficacia deportiva. Descubrieron un filón de adeptos que comprobaron cómo en las retorcidas carreteras de montaña japonesas, la eficacia de un peso mínimo con un afiladísimo motor atmosférico podía poner en serios apuros a las grandes máquinas de la competencia. Y entonces los demás comenzaron a hacer pequeñas incursiones en ese territorio, unos con más acierto que otros (Nissan sacó sus Pulsar GTi y GTi-R, Mitsubishi los Mirage Cyborg R, ZR y RS, Toyota los Starlet más pepinos y ligeros, Mazda su 323GTR, etc.).
La fórmula que Honda ha perfeccionado con el tiempo (y que ahora ha dejado de lado deliberadamente), es infalible: Utilitario de peso pluma, con un buen chasis, con suspensión independiente y frenos de disco en las 4 ruedas, con un motor rabioso que pese poco y corra mucho, y con una puesta a punto ágil y eficaz. ¿El resultado? Un repertorio de réplicas de coches deportivos de alto nivel, en formato utilitario, con mecánicas MUY refinadas, soluciones propias de la competición o de los grandes superdeportivos exclusivos, con un mantenimiento muy razonable y una fiabilidad más que comprobada. Ese es el gran atractivo detrás de estos pepinillos.
(Un Civic EF como nos gusta, bajado al suelo, con llantas old-school y semibackets)
Ese fue el planteamiento inicial, y el atractivo de su momento. Hoy en día, no sólo la cosa no se ha echado a perder, sino que estos coches de hace 20 años ahora resultan más interesantes que entonces: Porque ahora ya no se hacen coches con ese peso pluma y esa rabia, y porque con los años han ido apareciendo mil fabricantes de piezas que pueden convertir tu pequeño Honda en un misil rodante. Y eso mola mucho.
Visto esto, vamos a hacer ahora un repaso muy rápido a las opciones más comunes de Hondas de los 90 que se contienen en este formato.
La gran opción mítica y más extendida es el Honda Civic. Hay muchas opciones, motorizaciones, y modelos distintos. Básicamente, de los más míticos de estos años encontramos 3 generaciones, el EF (finales de los 80, cuadradote y bajito), el EG (principios de los 90, redondeado, ancho y bajito), y el EK (finales de los 90, diseño más actual). El Civic es un standard del JDM, todos lo conocen, a todos nos gusta, y sabemos que con las piezas necesarias puede convertirse en un aparato capaz de hacer mucho daño en según qué carreteras. Además, de los dos últimos podemos elegir versiones hatchback, berlina y coupé.
(Civic EF negro en primer término, Civic EG blanco al fondo)
De los mismos Civic anteriormente descritos derivan unos extraños modelos difíciles de ubicar en el mercado o de buscarles competidores: Los CRX. Se trata de una versión más "deportiva" del Civic, que compartiendo mecánica con el utilitario recibe una carrocería más ligera, más baja, más agresiva, y un interior también más deportivo. Los CRX son 3, aunque el primero de todos casi lo descartamos por ser realmente difícil de encontrar en España, y porque no pertenece a la era a la que nos referimos aquí. El segundo CRX (denominado EF) es enormemente conocido, y es muy atractivo por su concepto de coche medio ochentero medio noventero, de líneas cuadradas y angulosas, con unas medidas que llaman la atención por ser tan pequeño y tan tan bajito. Su peso ínfimo, su chasis ágil y equilibrado, y su motor 1.6 de más de 125 cv le convertían en un cochecillo ideal para reproducir el manejo de un deportivo a escala, en miniatura, pero con unas plazas traseras de emergencia (como metas ahí detrás a un adulto más de 5 minutos te deja de hablar el resto de su vida), y un mantenimiento irrisorio. Después vino el CRX Del Sol (sí, lo sé...), con un concepto muy distinto, en formato targa y biplaza. Para muchos fue un competidor del Mazda MX5, si bien nosotros pensamos que tanto su motor B16 de 160 cv como su tracción delantera le alejan del concepto (aunque entendemos que algunos sólo quieren ver que ambos son más o menos descapotables, biplazas, y pequeños).
(Honda CRX de segunda generación en todo su esplendor)
A parte de estos dos iconos, surgen otros modelos de Honda de los 90 que resultan realmente interesantes, aunque empiezan a ser bastante más difíciles de ver y exclusivos. Por un lado tenemos el Prelude, un coupé con más empaque y de mayor tamaño que el Civic, nacido en plena moda de los coupés de tamaño medio de los años 80-90, que por un precio razonable ofrecía un equipamiento más que decente, un diseño agresivo, y unas motorizaciones de 4 cilindros que le permiten moverse con bastante decencia. La peculiaridad del Prelude es su sistema de 4 ruedas direccionales, denominado 4ws (four wheel steering). Este sistema, que también equiparon otros deportivos grandes japoneses de aquellos años (Nissan 300ZX, por ejemplo), permitía mayor ángulo de giro en las ruedas traseras que los demás, y hacía que su comportamiento fuera bastante ratonero. Es muy llamativo ver un Prelude aparcando, girando a tope la dirección mientras sus ruedas traseras cogen un ángulo muy llamativo.
(El Prelude más molón que hemos visto nunca en vivo y directo. Estilo JDM limpio y sutil)
Y además del Prelude, existe otro aún más exclusivo y más deportivo: El Honda Integra. En España la mayoría de Integras son Type-R (he visto alguno normal pero son aún más raros de encontrar). El Integra Type-R deriva directamente del Civic, pero en lugar de su conocido motor B16 de 1.6 litros, monta una versión llamada B18, muy muy similar, pero con más cilindrada (1.8) y aún más potencia. El resultado son más de 180 cv, estirando por encima de 8.000 rpm, en un coupé ligero y agresivo. Además, el Integra Type-R traía de serie una equipación netamente deportiva, casi radical, con asientos Recaro Speed, un volante muy deportivo, un diferencial autoblocante delantero que le da una enorme eficacia en las curvas, y otras lindezas. Hay un Civic que también monta motor B18, del que luego hablaremos (no me mordáis la cabeza todavía, haced el favor).
(El Honda Integra Type-R que probamos en su día aquí, y que hoy vuelve a nuestro blog para juntarse con sus amiguitos)
Pues ya visto el panorama del que hablamos, y los modelos que se manejan muy por encima (no os toméis lo anterior como una guía de esos modelos, porque cada uno es un mundo, tiene miles de opciones, y ya sabéis que nuestros manuales sobre modelos concretos suelen ser bastante más exhaustivos...), ya podemos explicaros un poco de qué van estos coches, cómo hay que enfocarlos, y por qué son importantes en la historia del automóvil y en el panorama actual de coches petadores.
Porque un Honda de los que hemos explicado supone una opción diferente a un GTi mítico, que podemos usar a diario con total practicidad y un mantenimiento discreto, pero capaz de ponernos una sonrisa en la boca cuando hundimos el pedal, estiramos hasta bien arriba y comenzamos a hacer manos, metiendo y quitando hierros como posesos. Porque incluso en el caso del Integra Type-R con su motor 1.8 apretadísimo el consumo es muy contenido, y las revisiones no van mucho más allá de las que suelen pasar otros coches más comunes. Y su fiabilidad suele ser enorme, si se le ha dado una vida normal al coche, y se ha cuidado un poco (cambios de aceites, correas, filtros, lo típico...) no debería dar problemas, incluso con kilometrajes que pasan de 200.000.
Esto mismo se puede aplicar a otros utilitarios deportivos, sin duda, pero los Honda a los que nos referimos tienen siempre una mecánica más especial, más de carreras, más entusiasmante. Porque cuando examinas a fondo y en detalle un motor B16 o B18 "pata negra" compruebas que las cosas están muy bien hechas, que los materiales de sus componentes son serios, que la alzada de las válvulas es muy agresiva, que su admisión está muy trabajada, que su sistema V-Tec, aunque suelen hacerlo un poco exagerado a propósito para que tire un poco menos a bajas vueltas, y se note más tirón en altas, es realmente muy sofisticado (más aún en plenos 90, cuando aquello de las distribuciones variables todavía no se sabía muy bien de qué iba), y sus cilindradas de carrera corta hacen que a enormes regímenes de giro la velocidad lineal del pistón no sea tan tan elevada, manteniendo una fiabilidad y un desgaste más que razonables. Y aunque son coches de tracción delantera con motor transversal, y tiene que ir por delante del eje delantero casi obligatoriamente, se nota el esfuerzo por colocarlo todo lo retrasado que han podido, se nota que la puesta a punto de su chasis y el diseño de sus geometrías es exquisito (hablamos de sistemas "double wishbone" delanteros, como los deportivos gordos), y un puesto de conducción que siempre resulta natural y cómodo para conducir al ataque.
Por eso, cuando hemos podido conducir uno de estos cacharrillos con cierta alegría, te da la sensación de ir pilotando una especie de super GTI ciclado y radicalizado. Su conducción sigue siendo la de un delantera ligero y rabioso, pero aquí todo es más y mejor: Más aplomado, más ágil, más rápido, más eficaz, más aceleración, más frenada, más tracción, mejor manejo, mejor control, mejor sensibilidad de todo en las manos, mejor puesta a punto... Es como si un utilitario GTI imitara las excelencias de un deportivo pata negra, y la reprodujera a escala. Además, si sabemos lidiar con el subviraje propio de esta configuración mecánica, los que frecuentamos los tramos de montaña sabemos que un delantera puede ir igual de rápido que un trasera, pero por lo general vas sufriendo menos y te peleas menos en cada curva, haciendo que sea más fácil ir a un ritmo muy rápido sin temer tanto por tu vida (aún así, ya sabéis que hay coches y coches, y que hay traseras muy blandengues que nunca se revuelven, y delanteras que son cabras locas y no te dejan ir rápido sin intentar matarte).
Vas cambiando hierros con decisión (suelen tener un cambio muy preciso y rápido), y el sonido característico y metálico de su motor V-Tec se va repitiendo una y otra vez con un grito inconfundible, como de coche de carreras pero con todo más civilizado y sincronizado, más razonable y ordenado.
Además, las posibilidades de intercambiar las mejores piezas de unos y otros es notable, y aunque algunas conversiones dan algo de guerra, hay tantos swaps y tantas mejoras ya hechas entre unos y otros, que no resulta nada complicado encontrar en internet toda la información y muchas de las piezas necesarias para hacer cualquier invento que se te ocurra.
(El Prelude que os enseñamos antes. Las 4 ruedas direccionales hacen que tengas que andarte con ojo al bajar la suspensión, pero en este caso, les ha quedado requetebien)
Y si recurrimos al mundo del aftermarket, encontramos que hay practicamente de todo, y que si tenemos dinero suficiente, podemos hacer algo indecente con un utilitario (y hablo de cosas enfermizas, tipo salpicaderos de carbono, carrocerías de carbono, fondos planos con difusor y splitter, cambios secuenciales, admisiones de carbono con ITB's, culatas de compresiones absurdas, preparaciones por encima de las 10.000 rpm, y cosas por el estilo). Hay preparadores más o menos oficiales de reconocido prestigio (Mugen y Spoon son los de más renombre), y si no queremos irnos a cosas estratosféricas, también hay fabricantes asequibles de mil tipos que hacen brazos regulables de aluminio, escapes, admisiones, suspensiones roscadas y kits de frenos más ajustados al presupuesto del quemado medio.
Pero ahora, volviendo a la realidad, vamos a ponernos trágicos... ¿Qué pegas tienen estos coches que tanto alabas? Por supuesto tienen muchas pegas, unas más livianas o discutibles, y otras de más envergadura. Por un lado, el mayor de todos sus inconvenientes es su precio de compra. Se cotizan caros, y aunque es verdad que te hacen un apaño con un coche práctico que puedes usar a diario, y además corre notablemente, sin romperse, se hace un poco duro pagar 6.000 euros por un coche delantera de 160 cv, lo mires por donde lo mires. Los hay más baratos, y también los hay más caros. Los motores de recambio generalmente también suelen ser caros, y aunque ya hemos dicho que ya hay piezas aftermarket baratas para estos coches, hasta hace poco y por lo general, se trata de piezas caras.
Otra pega que cada día pone más gente a estos coches, es su componente de postureo y stance (cada día más abundante). Yo ahí no pongo objeción, porque hasta le veo su gracia, pero sí es verdad que es más común encontrar un precioso Civic con muchas piezas aparentes y vistosas, pero que en realidad es sólo estética, y no anda ni a tiros, que por ejemplo, cuando ves un Renault 5 GT Turbo y sabes que en el 99% de los casos se trata de un enfermo que te va a dar sopas con ondas. Y como la culpa de todo ese postureo no es más que de Internet, que nos trajo la idea de las llantas de colores cantosos como solución definitiva para convertir tu coche en una maravilla del JDM; yo no voy a abundar más en el tema.
Otro punto en contra, que siempre he pensado, pero es cierto que no es más que una opinión personal, y no va a ninguna parte, es si la diversión de un coche de este tipo justifica su precio, frente a la diversión que te pueda dar un coche de tracción trasera bien plantado, por el mismo dinero. Yo tengo el Colt, ya lo sabéis, y ahora le acabo de calzar el motor MIVEC de 175 cv, su grupo corto y su autoblocante delantero, convirtiéndose en algo muy parecido a un Civic Eg6 vitaminado, pero también tengo el BMW e36, con sus 6 cilindros como 6 soles, y su culete moviéndose cuando abres gas... No sabría qué decirte, yo creo que un trasera me llena más como experiencia de conducción, es más "the real thing", pero cuando le das sopas con ondas a un incauto con tu pepinillo tracción delantera, también sonríes, también te enamora, también hace ilusión... Otro asunto a considerar, sin duda.
Si eres de los míos, y te da bastante igual todo porque lo que quieres es un coche que corra, que entusiasme, y que no te cueste un riñón mantenerlo o repararlo, te aseguro que un Civic, un CRX o un Integra valen la pena, aunque te dejes un buen dinero en comprar uno decente, y otro poco en darle un toque peleón. Nuestros amigos con estos hierros están bien felices, y cuando te toca pegarte con uno en una carretera sinuosa te lo pone realmente complicado. El único motivo en esta vida por el que yo no tengo uno, es porque ya tengo el Colt, que es muy similar, y me he metido en camisas de once varas para meterle el motor Mivec, y sería una tontería ahora comprarme un coche muy similar cuando tengo esa necesidad cubierta.
¿Opciones factibles para todo el mundo? Pues ya lo comentamos alguna ocasión anterior, pero lo repetimos: El Civic MB6, es decir, el Civic 5 puertas de los años 90, con motor B18 como el del Integra Type-R pero algo menos apretado, te ofrece por unos 3.000 eurillos un coche con 170cv, que sube de vueltas como un cohete, y que es fácil de mantener a todos los bolsillos, con autoblocante delantero, y encima es muy práctico con sus 5 puertas, sus plazas traseras estupendas, su maletero decente, etc. Si quieres hacerte algo más picante, la opción del MB6 te sirve para hacer un despiece completo y meterlo en un Civic más barato de 3 puertas, para dejarlo con motor B18, su caja de cambios con autoblocante, y demás parafernalia que nos gusta. Si no te quieres meter en líos, también te queda la opción simple: Te compras un Civic VTi de serie que no esté muy cascado, le haces una buena revisión completa, y le metes las cuatro chucherías necesarias para pasarlo bien (suspensiones, algo de frenos, y a correr). ¿Que quieres un misil? Ok, pues te compras un CRX o un Civic, le metes un motor K20 del Civic Type-R moderno, unos árboles de levas, una admisión, un escape, una repro, y lo pones en 250 cv, listo para salir volando hacia la retirada de carnet. Porque otra cosa no, pero opciones de hacer cosas con Hondas, hay unas cuantas...
(El motor B18 del Integra Type-R)
En resumen, y para terminar antes de que se me vaya la cosa de las manos y me acabe comprando un Civic, como ya acabé haciendo cuando hablé de las bondades del BMW e36:
Los Hondas pepinillos de los 90 son coches necesarios en la historia del automóvil, en el panorama actual de coches petadores, y como opción latente en nuestras cabezas cuando hablamos de comprar un coche de diario con potencial para sembrar el mal. Porque plantean una opción única de hacer un utilitario deportivo, alejada de la tradición occidental de GTi, en la que han querido dar 8 vueltas de tuerca al concepto, tratando de hacer enorme su eficacia dando mucha potencia con poco par (lo que hace que su eje delantero digiera mejor el subviraje y no se atragante con montañas de par), lineales, explosivos arriba, y queriendo hacer todo lo posible por la eficacia de lo que un cochecillo de diario ligero y práctico puede hacer en una carretera revirada. Por eso, si no existieran, habría que inventarlos (y de hecho ahora sería estupendo que se reinventaran, porque van haciendo falta).
Son utilitarios con mecánicas que combinan (casi como nadie sabe hacer) una fiabilidad proverbial con un rendimiento explosivo, que han querido reproducir en su escala y su segmento las soluciones y elementos de coches de muy alta gama, con un chasis delicioso, con un esquema de suspensión sublime, con un comportamiento descarado y unas posibilidades de preparación realmente sorprendentes. Y es que los japos siempre han sabido bien cómo hacer aparatos que nos gustan, que funcionan, que convencen, y que añaden al metal una buena dosis de drama, teatralidad, y gestas épicas para envolver a sus coches en un "algo" que los hace realmente deseables.
Es una coincidencia que esté grafiteada la palabra COCO en la pared? jajajaja Muy grandes como siempre, cada día me enamoran más los CRX =)
ResponderEliminarPoLE! :D
ResponderEliminarAplausos, sin más. Dan ganas de salir a comprar uno... por mis lares corre un crx eg muy cuidado que siempre me ha puesto los dientes largos, largos... así como los civic de antes de la nave espacial (con perdón).
Lo único que no me acaba de convencer es el prelude... creo que hubiera sido mucho mejor con esa carrocería un trasera con motor a lo s2000, por ejemplo. Tiene pinta de trasera, no sé, se ve largo. Quizá son manías mías...
PD: Pero qué bien les sientan a los hondas de los 90 las llantas blancas a lo rally...
gran artículo! aquí me tenéis a mí, con 21 años y ahorrando para un EK4, espero que no suban los precios más ahora por vuestra culpa...!
ResponderEliminarSin duda, el mejor vtec:
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=No_kbFvG_S4
(otro quemao)jajaja
Ah, lo que daría yo porque mi ek3 fuera un ek4 (o un ek9 ya puestos). Siempre tendré en mente el swap, la suspensión y los frenos, pero luego me sale la vena "racional" y pienso que con 245.000km no merece la pena apuntar el coche al gimnasio... creo que lo más sencillo sería tirar a por un Caterham, aunque no tenga nada que ver.
ResponderEliminarPor cierto que a veces se olvida, dar la enhorabuena a los chicos de Racing Shot Works por esas pedazo de fotos! Le dan la puntilla a un articulo cojonudo ;)
ResponderEliminarRealmente estáis consiguiendo que me interese mucho por los JDM de los 90, yo que siempre había sido de 6 y 8 pucheros alemanes atmosféricos; la verdad es que dentro de los compactos no hay duda de que los japos son los mejores (a opel le falta pasión, a VW le falta calidad y fiabilidad, etc), y no niego en un futuro acabar comprando un CRX o un 323, pues es una línea que siempre me ha atraido mucho. A ver si sacais un reportaje de "cual es el mejor jdm para que un fuelwaster use a diario" o algo por el estilo, porque lo que comentais de la fiabilidad de los motores B16 y B18 me convence bastante
ResponderEliminarLa verdad que lees el articulo y dan ganas de comprarse un pepinillo de estos ya solo subirlo de vueltas tiene que poner los pelos de punta y ese sonido que tienen los jodios que sonidoo!! Lo que atrae tanbien son las opciones de personalizacion que tienen no tan al alcance de muchos otros tipos de coches y eso le da su encanto.muy buen articulo si señor ya se esperaba como agua de mayo XD
ResponderEliminarGran artículo, lo esperaba... hay un civic con motor B16 y 160cv (ek9 creo, por debajo del typeR), que no me importaría tener, de hecho le dije a mi primo de Salamanca que si tiene oportunidad, me lo compre (me echan de casa de esa seguro); la idea del B16 en lugar del B18 es tema impuestos, pagan la mitad (ya pago el doble por mr2 que por el kadett, y me jode una barbaridad...) y no hay tanta diferencia.
ResponderEliminarLa verdad que hay un antes y un después cuando pruebas un coche japones (lo mismo que un ferrari, pero un ferrari no lo he probado...), y a todo aquel que no lo haya hecho, se lo recomiendo.
PD. Felicidades a RacingShotWorks, geniales fotos.
De lo que me acabo de acordar... Qué me decís los entendidos acerca del Mazda mx3 1.8 V6 de 136cv? Sería digno de ser llamado pepinillo japo?? El motor V6 de menor cilindrada que se ha fabricado en serie, pero se poco de él, no se si daba fallos, aunque tampoco he buscado en profundidad... lo mismo estas vacaciones de navidad me animo
ResponderEliminarEs que estos motores no suenan ... chillan!!!
ResponderEliminarYo solo digo, Prelude 2.2 vtec cuarta generación... es una pasada de motor, y si bien no entra en la categoria de compacto, es una diseño precioso y están tirados de precio ahora mismo... Dios dame dinero o mucha paciencia...
ResponderEliminarPor cierto muy guapas las fotos!
Aunque me gusta mucho el JDM y los Honda, yo sinceramente no me compraria ninguno a excepcion del NSX pero tienen precios de locura, porque para comprar coches de segunda mano "caros" y tener que meterles dinero para dejarlos correctos prefiero comprar un Miata y hacer una cosa chula, o para tener un delantera prefiero comprar un GTI frances de los 90 y coger piezas de desguace y hacerme algo efectivo (aunque tal vez no tanto como un honda, no se todo seria probarlo concienzudamente porque por opciones que tampoco sea).
ResponderEliminarUn saludo
Xule
Muy buen reportaje, estos coches me tienen enamorado. De hecho los estuve mirando muy seriamente hace unos meses cuando estuve buscando mi primer coche.
ResponderEliminarFinalmente me compre un Peugeot 206 GTI de 2005, que creo que viene bastante mejor para el dia a dia por las comodidades que trae por ser bastante mas moderno.
Eso si, tengo claro que algun dia (quizas cuando tenga mas dinero para meterle bastantes chuches) me comprare un Civic EG6, un CRX o, quizas con mas suerte, un RX7. Puestos a soñar... :D
me encantan todos los japos de los 90, en especial los que estirán las marchas hasta el infinito y más allá (you know), me parecen los coches perfectos para empezar en esto o para convertirlos en verdaderos cohetes con cuatro chuches.
ResponderEliminartengo un conocido que tiene un civic EG de 1.4 y 90cv. cuando me subí me enamoró, vas sentado bajísimo y la posición de conducción me pareció muy buena (que conste que solo he ido de copiloto). lo que más me llamó la atención es con qué ganas sube de vueltas (me pareció que lo hacía con más ganas que mi Clio RS) y cómo te incita a ir siempre sobre las 5000rpm y no bajar de ahí ni aunque tu vida vaya en ello.
desde entonces (aunque de antes ya me tenía loquito) me está rondando la cabeza (aunque los integra también me llaman mucho). me gustaría con el tiempo poder hacerme con un S14 y un delantera "pocket rocket" (probablemente un civic) para tener un delantera, un trasera, un atmosférico y un turbo.
PD: hace unos meses estuve en Kotarr y vi un crx parecido al de las fotos. la verdad es que me pareció espectacular (y creo que era el único que sabía apreciarlo). es el segundo que veo en mi vida, pero era precioso, me quedé mirando como un tonto.
PD2: como dicen más arriba, las fotos son chulísimas, así que los chicos de Racing Shot Works se merecen un aplauso (clap clap clap).
Muy buena entrada, ahora solo falta que compréis un par de ellos para acabar de desbaratar su mercado de 2º mano (lo que a mi me beneficiaría XD).
ResponderEliminarEn mi opinión, son coches fantásticos, está mas que probado que sus motores son rocas y son muy divertidos, ideal para empezar en este mundillo, lástima del precio desorbitado que tienen.
Yo estoy muy contento con el mío, es divertido, corre que se las pela y el mantenimiento es bajo (como ya han dicho en el artículo) pero aún así, voy a poner el contrapunto al artículo y voy a dar algunos detalles que no me han llegado a gustar con el paso del tiempo:
1º El precio: El por qué de esto, no lo entiendo, pero es increíble ver como los civic del ep en adelante bajan rápido de precio, mientras que los hondas de los 90 parecen haber encontrado un suelo que no es posible perforar y da igual el estado en el que estén (a excepción de los mb).
2º El par: Esto no es tanto un problema, todo depende de qué coche vengáis, pero olvidaos de sentir esa presión en el pecho al acelerar en un turbo, he ido de copiloto en coches de potencia similar al mío con turbo y puedo decir que da mucha más sensación de correr. Al principio mola mucho porque parece que el coche va a explotar y en marchas cortas es un festival, pero en marchas largas o vas alto de vueltas o las recuperaciones se hacen eternas y te toca bajar hierros.
4º Es un coche de curvas: Si os gustan las carreteras de montaña o los circuitos revirados, enhorabuena, es tu coche, pero si sois de altas velocidades en autopista, hacer paralelos y demás, buscaros otra cosa, yo he llegado a odiar el coche después de 3-4 horas de autopista con el motor girando entre las 4000 y las 4800 para mantener velocidades de 120-140 y eso sin ningún tipo de insonorización entre el motor y el habitáculo es un infierno, ni siquiera puedo poner música porque para escucharla tengo que subir el volumen una barbaridad. Sin embargo, lo amo cuando vengo de una carretera con curvas, es así. Si lo quieres como 2º coche, adelante, no le encontrarás pegas, pero si lo vais a usar como único coche, pensad bien las mods antes de hacerlas.
Si pilláis un honda con motor apretado (léase los typeR) y lo quereis preparar sin turbo, mentalizaos de que vais a gastar una auténtica pasta para arañar 10, 15 o 20 cv y hay que hacer repro si o si, con todo lo que eso conlleva. Como experiencia personal os digo que yo gasté unos 2000 - 2500 euros para sacar 15 - 20 cv. En algunos casos incluso compensa rascarse un poco más el bolsillo e irse a por un swap mas gordo.
P.D. Sr. Pera, esa foto del vano motor del Integra esta ya un pelín obsoleta, deberías actualizarla :P
Grandes coches, sin duda, con un carisma especial ... Y aunque los conozco bien (he tenido varios), me parce que por lo general están muy mitificados.....
ResponderEliminarUna cosa que siempre me ha llamado.la atención, es el escaso éxito en las comparativas de la prensa seria de la época .
¿algún comentario al respecto?
Gracias y in saludo fieras!
Es cierto que son juguetes divertidos, pero sumándole al precio del coche la preparación (porque de serie no dejan de ser coches que no dicen nada, al menos los que yo he llevado) dejan de ser interesantes para cualquiera que no sea un fanático de la marca. Ya si te pones a meter el K20 y tal olvídate porque por el precio al que sale te compras directamente un coche con la tracción en el sitio correcto y que le moja la oreja de todas todas.
ResponderEliminarDesde mi punto de vista son coches muy sobrevalorados, con una fiabilidad actualmente en entredicho (podéis crucificarme) porque se les ha dado mucha caña, cuesta la vida encontrar una unidad en buen estado, además el interior es deprimente.
Muy buen artículo y muy buenas fotos, tengo visto algunos de esos coches, de hecho me he picado con alguno de los JDM Brothers por ahí.
¡Un saludo!
El motor b18 del integra, son 200 cv los japoneses, 190 los demas.
ResponderEliminarFaltaria comentar el Civic EK9 Type R con su 1600 de 185 cv atmosfericos.
Gracias a todos los qué me habéis felicitado por las fotos!!! Es todo un placer hacer fotos rodeado de tan buena gente, y tan buenos pepinos!! Si queréis algo ya sabéis, estamos en Facebook y Twitter!! Saludos!
ResponderEliminarYo disfruto de un Civic Fn1 con el sistema de frenos y suspension del Fn2 y alguna cosilla mas, y no puedo ser mas feliz, en tramos montañosos me saca una sonrisa, solo echo en falta que no sea un R y hacerlo girar por encima de las 8000v. Algún día caerá un S2000, y así combinar motor Honda con propulsión y para mi ya podrá arder el munda xDxD
ResponderEliminarCreo que falta el nsx, que recuerde no he visto ninguno real, que joven soy.
ResponderEliminarCada vez que habláis de algún coche o tipo de coche me dan ganas de comprármelo. Lástima de dinero, la verdad. Siempre me han gustado los pepinillos con motor vtec pero los precios que manejan me tiraban para atrás (aunque si echas cuentas lo amortizas debido a su bajo mantenimiento, pero bueno).
ResponderEliminarGrandísimo reportaje.
Un saludo ;)
Os habeis dejado este modelo de Prelude
ResponderEliminarhttp://fotos.autocasion.com/dataimg/Pictures/PKW/P/000/013/p0002062.jpg
Yo tuve la ocasión de probarlo, con su sistema de 4 ruedas directrices, su paso por curva alucinante, su gran potencia para una cilindrada relativamente modesta, su precioso sonido y su instrumentación casi futurista (para la epoca).
Un coche muy recomendable para el aftermarkt hoy dia, y seguro que se puede conseguir uno bien barato.
Son malos tiempos para reproducir estos pepinillos. Si bien ahora está de moda la ligereza (BIEN), y todos los utilitarios pesan menos que sus prededesores, los motores apretados no volverán. Para pasar la normativa de emisiones se necesita un motor pequeño turbado, y para conseguir potencias como las que se manejan en el mundo GTI últimamente (rascando ya los 300 cv, o incluso superándolos) también hace falta un soplador. Bajo mi punto de vista, el último de la estirpe es el Integra DC5.
ResponderEliminarHola! Primeramente, enhorabuena por el blog porque es una pasada. Me lo he leído entero, desde el origen de los tiempos, y me encanta, tanto por gustos, como por la manera de redactar y hasta ese humor, a veces incluso un tanto absurder, con el que me identifico plenamente, me considero un autentico Fuel Waster!!
ResponderEliminarCon respecto a este tema en concreto, me ha hecho gracia el tema del civic mb6 con su motor b18, pero mi duda es, en su día hablasteis de montarlo en una carrocería ek de 3 puertas, ¿se puede montar en la carrocería eg igualmente? Me llama mas esa carrocería para hacer este invento. ¿Podria ser cualquier modelo eg si tengo el mb6 entero como donante para poder pasar todo de uno a otro?
Gracias de antemano y larga vida a FW!! Os merecéis lo mejor.
Un saludo desde Vivo (PO), Galicia Terra de Rallyes :P
//Mpepower
I am a bimmer fanatic! The thing is, after reading this great post...I am tempted to look for one this pepinillos, they sound like a lot of fun!! Bravo Fuelwasters!
ResponderEliminarPara el anónimo de dos entradad antes, el b18 del mb6 se adapta perfectamente al los eg, en internet hay a patadas. Me imagino que vives en Vigo (no en vivo xD) yo soy del otro lado de la ria y en la provincia hay mas de un eg cn b18. Un saludo
ResponderEliminarCorrecto, soy de Vigo, p*** autocorrector... XD Gracias por la aclaración, siendo así, es probable que en un tiempo haya uno mas! Jeje Saludos!!
ResponderEliminarCasualmente me acabo de comprar un Prelude 4 2.2 VTEC. A pesar de que ya no es el peso pluma que son los Civic contemporáneos, el motor es una joya, el chasis se comporta de maravilla y encima es bonito. Ah, y mucho más barato que un Civic EG VTI. Totalmente recomendable.
ResponderEliminarLees esto y te quedas babeando,mientras mis 30.000 km anuales y mi familia no me permitan hacer otra cosa continuaré sembrando el pánico con mi Altea XL del demonio.
ResponderEliminar-Yugulator-
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ResponderEliminarGran entrada, en vuestra linea. El invento del honda minusculo con el motor del type R moderno o el b18 alimenta llamas en nuestra imaginacion.
ResponderEliminarPD¿Para cuando una prueba del S2000? Que no será Type R pero...